… y allí, precisamente, donde golpean y aúllan las tormentas del mar, del cielo y de la tierra,
donde los elementos son látigos y espadas, furia, áspides en lucha,
y el terror oscuridad del corazón,
allí, justamente, aún a lo lejos y en lo alto,
EL FARO:
tan poderoso y solo,
tan impersonal e inmóvil,
tan radiante y salvador, tan sereno,
y, al fin, tan en compasión por y con nosotros, tan de primera piedra;
… oh, amiga o amigo: y por qué no ser faro del mundo en tu país,
en tu ciudad o barrio,
en la escuela o el trabajo,
en tu familia o casa,
incluso en ti mismo,
- en tu propio ser -
por qué, por qué no,
si el faro no tiene por qué hablar ni luchar,
sólo luce, brilla;
… y es que ¿ sabes ? ya nada, nada volvería a ser lo mismo.
Toutes les droites appartiennent à son auteur Il a été publié sur e-Stories.org par la demande de Antonio Justel Rodriguez.
Publié sur e-Stories.org sur 08.04.2012.
Contribution antérieure Prochain article
Plus dans cette catégorie "Général" (Poèmes en espagnol)
Other works from Antonio Justel Rodriguez
Cet article t'a plu ? Alors regarde aussi les suivants :