Prematuramente viuda, con sus treinta y dos años recién cumplidos, todavía no había tomado conciencia de que lentamente desde su trágica pérdida, se había convertido casi en una ermitaña, apenas cruzando un gesto de saludo a quien cada quince días le proveía de alimentos y otras mercancías, las que pedía por medio de una nota que enviaba con ésta misma persona.
Inconcientemente, el día de su trigésimo tercer cumpleaños, habiendo recorrido previamente su huerta y encontrándose ya en su jardín frente al rosal, arrancó una gran rosa amarilla y se dirigió, por primera vez en 5 años, al cementerio local.
Toutes les droites appartiennent à son auteur Il a été publié sur e-Stories.org par la demande de Eduardo Dip.
Publié sur e-Stories.org sur 26.02.2013.
Contribution antérieure Prochain article
Plus dans cette catégorie "Général" (Nouvelles en espagnol)
Other works from Eduardo Dip
Cet article t'a plu ? Alors regarde aussi les suivants :